No hace ni una semana que aparecía la noticia de la detención de Justin Bieber por conducir de forma ilegal en una carrera, bajo los efectos del alcohol y las drogas, que ahora nos enteramos de que ha vuelto a ser arrestado pero en esta ocasión en su país natal, en Canadá. Por si fuera poco, también hemos podido saber que el cantante no se presentó en el juzgado para una cita que tenía por el arresto en la carrera ilegal. Parece que el cantante se está ganando a pulso la deportación de Estados Unidos, que los ciudadanos llevan exigiendo desde hace unos días.
El propio Bieber se presentó de forma voluntaria ante la Policía y fue puesto en libertad después de pasar más de dos horas en una comisaría del centro de Toronto y deberá volver para presentarse ante un juez el próximo día 10 de marzo. Por suerte, la misma policía de Toronto explico en un comunicado que el cantante ha sido acusado de agredir al conductor de una limusina la madrugada del pasado día 30 de diciembre, cuando el conductor paso a recoger a Bieber y cinco personas más de un club nocturno de la ciudad.
Según ha denunciado el conductor, durante el trayecto de camino al hotel se produjo una discusión entre uno de los pasajeros y el mismo, a la que se unió otro de los pasajeros para dedicarse a golpear la cabeza del conductor en varias ocasiones. Cuando se decidió a llamar a la policía, el agresor abandono el lugar antes de que llegaran las autoridades. El abogado del cantante ha declarado que Bieber es inocente y que en todo caso solo se trata de una infracción menor.
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