Como ya descubrimos hace unos días, Justin Bieber comienza a mostrar su mejor faceta y es que parece ser que esta arto de crearse enemigos haya donde vaya. Por eso ha decidido tratar de madurar a paso ligero y después del concierto privado que ofreció a una fan que había quedado paralitica por un accidente de tráfico, ahora se ha trasladado hasta Filipinas para mostrar a los afectados por el tifón Yolanda su apoyo y un rato de alegría con la que olvidar por unos momentos, la terrible tragedia que viven.
El joven cantante se mostró en todo momento muy interesado mientras las autoridades le explicaban todo lo que el tifón había destruido. Se acercó hasta los más pequeños a los que abrazo y con quienes se dejó fotografiar, además de bailar y cantar con ellos también jugaron juntos. Un acto de buena voluntad que ayudo a que los más pequeños olvidaran durante unos momentos el terror que por desgracia les estaba tocando vivir. Y ahora nos preguntamos si Justin continuara con esta racha de buenas acciones.
Sea como sea, sabemos que antes de llegar a Filipinas el cantante solo pensaba en que esta visita aumentaría su fama y por tanto el dinero en sus bolsillos. Pero solo hay que apreciar como en las fotografías tomadas de aquel día, el cantante se mostraba feliz y alegre de verdad. Quizás esta experiencia haga recapacitar al joven canadiense y retomar de una vez el camino correcto en su vida y su trayectoria profesional, ambos bastante desviados desde principios de año. Nunca es tarde para aprender a ser mejor persona.
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